Arrancó la segunda etapa de Lionel Messi en la Major League Soccer (MLS). Y el primer episodio incluyó episodios interesantes pero incompletos en el Chase Stadium de Fort Lauderdale, el ordenado hogar temporal de InterMiami hasta que se construyó el Freedom Park. Partido 2-0. La diferencia debe ser muy grande, mucho más grande. Pero también puedo ser empático porque verdadero lago saladoliderado por el mendocino Pablo Mastroéni, no pude expresar algunos errores infantiles en el complemento, cuando la duela en casa paró errática y se detuvo hasta llegar al tranquilizante de Diego Gómez. Pero hoy es un tema secundario.
Por eso observó por primera vez que Lionel Messi se había impuesto en 2024. Se lo vio a 220 -aunque acá hay que decir a 110 porque si no se quema todo-. Tuvo 60 minutos del mejor Messi. Y una de estas personas cuando agitaba el reloj, entre ellos la persona que pronunció la historia en una cancha con trajes estadounidenses que se perciben argentina. Sí, es un montón.
Pero lo más importante es que el heno esté equipado. Viste, por primera vez, que este ciclo ha ocurrido, la mano de Gerardo Martino. Las alegrías son una acumulación de individualidades cercanas al retraimiento. Lejos está de ce conjunto anárquico qui se por momentos en 2023. Lejísimo.
La defensa fue mucho más sólida con el ex Racing Tomás Avilés como puntal. Ojo que también hubo que ligar los momentos con las distracciones de DeAndre Yedlin y con la sensibilidad del ucraniano Sergey Krivtsov. Pero hay una formación mucho más compacta. Si, eso es lo que haces Drake Callenderl’arquero, tiene mucho menos trabajo -tuvo una grande tapada en un cabezazo de Brayan Vera-.
Mejor función en el mediocampo. Sobre todo esto en los 45 iniciales. No descubrimos nada cuando expresamos nuestra emoción a Sergio Busquets. El catalán, que es el futbolista que más veces ha jugado con su compañero Messi con 571 partidos compartidos, es todo lo que se le da bien. Arranca como volante central para moverte desde una línea de tres, pero siempre estando en la ubicación correcta. A veces hay una visión de la libertad, y otras tienen relaciones con los laterales. Sin embargo, lo mejor es que la pelota entrega redonda.
A Busquets se le concedió la gracia Julien Gressel. Es un jugador muy dinámico y con el mejor criterio del alemán de 30 años, un viejo conocido del Tata Martino durante los partidos del Atlanta United. Es inteligente y servicial, además del tipo que acaba de acampar con el Columbus Crew. Retrocede, pasa bien y asegura que los tiempos de presión quedaron marcados, por viejos momentos, que permitieron al Inter Miami transformar una fiesta de fútbol en un monólogo.
También buen Paraguay Diego Gómez, nuevamente impreciso. Terminó siendo clave con la conquista de la final. Y yo también fui aprobado Roberto Taylorquien tiene el placer de medir el primer día del período durante los 38 minutos de la parte inicial.
El consorcio finlandés recibió la asistencia de messi, en el primer ataque directo, sin demasiado toqueteo, y remató cruzado para superar el poco convincente Guantazo de Zac Mac Math. Lo curioso es que para este momento el Inter Miami pecó de oportunidades. Un tiro libre de Messi que Glad subió a internet. Una intención -otro plus- del atleta olímpico que disparó al arco. También asociaciones de papás de fútbol con Luis Suarez que quedaron sin gas en los metros finales.
El capitán Scaloneta lo hizo todo bien en su partido inicial. Parecía un Messi en plena competencia y no uno del partido inaugural durante unas largas vacaciones. Si no veo como voy Eneka Eneli, que está en el suelo, recoge el balón para llegar al cuerpo en un gesto técnico que gusta a todos. La imagen del operativo incluyó al arma uruguaya, que fue recibida con honores por sus dueños pero también recibió cartas de su mejor forma. Queda tempo por delante, claro.
La segunda vez no fue buena. Los errores en la salida se combinan con un Messi algo más intermitente tras una hora de su mejor versión. Los alcanzó para trazar un slalom en el área grande para lanzarse en solitario a Gressel, que falló el remate final. También quiso lanzarse al ataque al golpe de Gómez -con la ayuda de Suárez, que participó en la final-. Y también que la jornada de la noche se desarrollará con una carrera por la derecha, una iniciación y una definición que MacMath tecleó con un brazo.
Puedo ir al Inter Miami. Messi está en llamas. El equipo aparecerá. Sólo necesito que lo bueno dure más. Lógica en un bautismo temporal.