Kiabi tiene buena pinta. la marca de ropa “no cerró ninguna tienda en 2023”, afirmó Ouarda Ech-Chykry, su directora para Francia, durante una rueda de prensa dedicada a los resultados anuales de la marca, el martes 23 de enero. Mientras el número de cierres de tiendas de ropa aumenta en Francia en 2023, en Pimkie, Kookaï y Naf Naf, el distribuidor de moda low cost se enorgullece de tener “resistido” en Francia, su principal mercado.
Las ventas de ropa allí han disminuido en volumen. «pronunciado» y ligeramente inferior en valor (- 0,3% en comparación con 2022), “teniendo en cuenta la inflación”, según datos provisionales del Instituto Francés de la Moda. Pero, a pesar de esta situación desfavorable, la marca, conocida por sus grandes superficies, “Continuó ganando cuota de mercado”, asegura Patrick Stassi, su director general. Casi el 13% de las ventas de moda infantil se realizan en Kiabi, en volumen, según la firma Kantar. Además, la marca ocupa el segundo lugar entre los distribuidores de ropa en Francia, detrás de Intersport y por delante de Decathlon.
El grupo, presente en veintiséis países, con 606 tiendas y córners, se enfrenta sin embargo a los mismos tormentos que sus competidores. En toda Europa, la inflación está obligando a los consumidores a reducir el presupuesto que gastan en ropa. La caída de la tasa de natalidad en Francia (−6,6% en 2023 respecto a 2022) y en España (−2,4% en 2022 respecto a 2021) amenaza la actividad de los departamentos de niños y bebés, uno de los puntos fuertes de Kiabi a la hora de captar clientes.
La competencia está aumentando «difícil», particularmente en Italia, donde la irlandesa Primark ha entrado en una intensa fase de expansión, reconoce François Haimez, director internacional de Kiabi. Por último, las tensiones en el Mar Rojo vinculadas a los ataques de los rebeldes hutíes yemeníes están ampliando los plazos de entrega de sus colecciones fabricadas en Asia. “dos semanas más” y obligándolo a revisar “el momento de su producción”especificar sus líderes.
Ampliación del parque tricolor
“Hay muchos peligros”, observa Stassi. Por ello, el grupo norteño propiedad de la asociación de la familia Mulliez, también accionista de Auchan, Decathlon y Leroy Merlin, se niega a detallar en términos comparables sus resultados de 2023 y a desvelar sus previsiones para 2024.
Según la dirección, el último ejercicio concluyó con una facturación de 2.210 millones de euros, es decir, un crecimiento del 1,1% en términos actuales. En definitiva, 2023 es, por tanto, muy diferente de 2022; el año pasado fue una cosecha «actuación». A pesar de la apertura de 64 puntos de contacto -el término casa para describir las tiendas y córners ubicados en marcas como Auchan-, el crecimiento de Kiabi se sitúa sólo en el 1,1%, frente al 10% en 2022 (37 inauguraciones).
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