“Simplificar, modernizar y asegurar, estas son las palabras clave de la validación de la experiencia adquirida (VAE) de nueva generación, tras la reforma votada en el marco del Ley relativa al mercado laboral de 21 de diciembre de 2022. Una reforma muy esperada porque, explica Marc Poncin, vicepresidente encargado de las relaciones institucionales del Grupo de actores y gestores de la formación, una red que reúne a quinientos profesionales de la formación y de los recursos humanos: “En veinte años de existencia, VAE se ha vuelto más compleja. Se ha vuelto engorroso, con reglas, prácticas y actividades diferentes. Para el empleado no siempre fue fácil navegar. »
Creado en 2002, el VAE permite reconocer tu experiencia ante un jurado mediante un título, diploma o certificado de cualificación profesional sin tener que pasar primero por el casillero de formación. Se podrán tener en cuenta experiencias tanto profesionales como personales relacionadas con el título deseado.
Los candidatos aspiran a un reconocimiento en su profesión, un ascenso, un cambio de trabajo o incluso un mejor salario. Ivette Ceretti, después de haber sido agente de viajes y luego guía, obtuvo gracias al sistema una licencia profesional como guía-profesora en el Conservatorio Nacional de Artes y Oficios. “Quería ganar más, pero a mis 54 años no quería cambiar de sector. Era el momento adecuado para convertirme en guía. »
Una ventanilla única
Hasta ahora, el procedimiento era más una carrera de obstáculos que un paseo por el parque. “Es mucho papeleo y durante un año dediqué todo mi tiempo libre a VAEdice Ivette Ceretti, Pero vale la pena ! » “El VAE es un gran dispositivo, pero es un proceso individual que requiere mucho trabajo y tiempo. Consecuencia: algunos candidatos perdieron fuerza”, explica Hélène Clédat, responsable del departamento de formación para el empleo de la Federación del Comercio y la Distribución.
El procedimiento anterior a la reforma era particularmente largo (dieciocho meses por término medio) y complejo: la solicitud debía presentarse mediante un Cerfa de cuatro páginas, acompañada de páginas de aviso. En esta etapa hubo un 60% de abandonos. Los plazos para la celebración de los jurados variaron, oscilando entre un mes y un año, y se estandarizó el apoyo. Resultado : “Solo el 10% de los interesados llegó a obtener su diploma”, señala Olivier Gérard, director de proyectos deluna plataforma digital VAE de Franciaque continúa: “Todo el desafío de la reforma es poner al usuario en el centro del sistema en lugar de obligarlo a perseguir a las distintas partes interesadas. Queríamos eliminar los irritantes. »
Te queda el 55% de este artículo por leer. El resto está reservado para suscriptores.